Las mudanzas BCN se remontan al Neolítico, con los primeros restos hallados en la ciudad, hasta la actualidad.
Barcelona, como capital de Cataluña y segunda ciudad española en importancia, ha ido forjando su relevancia con el paso del tiempo; desde ser una pequeña colonia romana hasta convertirse en la ciudad cosmopolita, donde las mudanzas BCN, están en boga y donde actualmente, se encuentra valorada internacionalmente por aspectos como su:
- Economía
- Patrimonio artístico
- Cultura
- Y su vida social.
Barcino, la antigua ciudad romana de la actual Barcelona, tomó la forma urbana de castrum en sus inicios, y oppidum después, con los habituales ejes organizadores cardo maximus (las actuales calles Llibreteria y Call) y decumanus maximus (actuales calles Obispo, Regomir y Ciudad). En la confluencia de ambos se hallaba el fórum, donde se encuentra la plaza de San Jaime, donde en la actualidad se encuentra la Generalitat y el Parlament, antiguamente dedicada a la vida pública y a los negocios. Desde este centro, la ciudad se diseñó con un trazado octogonal, con manzanas cuadradas y dos ejes principales:
- En orden axial horizontal (noroeste-sudoeste)
- Y otro vertical (sudeste-nordeste)
Estos, marcarían el futuro trazado de la ciudad, recogido por Ildefonso Cerdá en su Plan de Ensanche de 1859.
Mudanzas BCN en la Edad Media
En la Edad Media, el Condado de Barcelona predominó sobre el resto de condados catalanes, con la formación de la Corona de Aragón. Desde entonces, se incrementaron las mudanzas BCN gracias al aumento de población que vivió la ciudad, y la prosperidad económica, comercial y política que en estas fechas recibió la ciudad.
Barcelona llegó a convertirse en uno de los centros económicos, políticos, sociales, culturales y comerciales de un amplio territorio extendido por toda la costa del Mediterráneo.
Llegada la época bajomedieval, llegó la crisis económica y social, que se prolongó hasta la Edad Moderna. Y con ello, la reducción considerable de las mudanzas BCN. Todo ello agravado por los conflictos militares como la guerra de los Segadores (1640-1651) o la guerra de Sucesión (1701-1714).
A partir del siglo XVIII comenzó una etapa de pujanza económica y gracias a ello se recuperaron también las mudanzas BCN. Llegaron a su máximo esplendor en el siglo XIX, con el gran crecimiento de la ciudad, no sólo a nivel demográfico, sino también económico y urbanístico. En ese momento, se anexaron varios municipios a la ciudad. Y en 1860 se llevó a cabo, por el ingeniero Ildefonso Cerdá, la reforma de la ciudad con el “Eixample”. Contaba con una estructura en cuadrícula, abierta e igualitaria, con unos chaflanes de 45º para permitir una mejor visibilidad. El desarrollo del plan duró casi un siglo y ello colaboró en la multiplicación de mudanzas BCN, que se había quedado algo estancada dentro de la muralla medieval, que fue derribada en 1852.
El siglo XX comenzó con las mismas agitaciones políticas con que acabó el anterior siglo, culminando con la Guerra Civil. Este fue un período de cierta decadencia que minimizó las mudanzas BCN, hasta llegada la democracia que revitalizó de nuevo la ciudad.
Su progreso económico-social llevó a la ciudad a su máximo histórico, a la par que las mudanzas BCN, llegados los Juegos Olímpicos de 1992 y el Fórum Universal de las Culturas de 2004, que situaron a la Ciudad Condal como metrópoli de prestigio reconocida internacionalmente, que atrajo a multitud de turistas, muchos de los cuales, terminaron por establecerse en la ciudad ejecutando sus mudanzas BCN.
Mudanzas BCN en la actualidad
A fecha de hoy, las mudanzas BCN se realizan a diario, tanto en viviendas particulares como en oficinas; y empresas de mudanzas especializadas, como Mudanzas Flippers Int., se encargan de trasladarlos, de forma rápida y con las mejores garantías.
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